Sabemos que es muy tentador renunciar a un trabajo durante las épocas decembrinas por diversos factores como tener el aguinaldo, disfrutar las fechas decembrinas sin tener que pensar en el trabajo o por pensar en iniciar un nuevo ciclo con el nuevo año. Pero, antes de renunciar, asegúrate de que tus razones sean claras y bien fundamentadas. Evalúa si estás renunciando por una mejor oportunidad, problemas en el trabajo actual o razones personales.
Y sí la decisión es fija e inamovible, renunciar es una decisión importante que requiere una planificación cuidadosa para asegurarse de que el proceso se realice de manera profesional y sin problemas. Es por esto que en esta ocasión queremos compartirte algunas recomendaciones que te invitamos a considerar antes de hacerlo.
AVISA A TU EMPLEADOR CON LA MAYOR ANTICIPACIÓN POSIBLE.
Aunque el plazo de preaviso no es obligatorio en México, la recomendación general es dar mínimo dos semanas de previo aviso. Redacta una carta de renuncia profesional y concisa en la que indiques tu intención de dejar el trabajo. Agradece a tu empleador por la oportunidad y proporciona la fecha exacta en la que planeas dejar la empresa. Antes de entregar la carta de renuncia, programa una reunión con tu supervisor para notificar con antelación. Esto demostrará profesionalismo y te brinda la oportunidad de explicar tus razones.
A menos que tengas una razón válida para hacerlo, no te vayas antes de tu última fecha de trabajo acordada. Cumplir con tu notificación de preaviso es importante para no dejar a tu empleador en una posición difícil y no dejar una mala imagen sobre tu profesionalismo.
MANTÉN UNA ACTITUD PROFESIONAL Y POSITIVA DURANTE TODO EL PROCESO.
Evita críticas o comentarios negativos sobre la empresa o tus colegas, ya que esto podría afectar tu imagen a largo plazo. Aunque estés dejando la empresa, es importante mantener una red profesional sólida, te pueden facilitar referencias en un futuro. Conéctate con colegas en LinkedIn y asegúrate de mantener una relación profesional positiva con tu empleador actual.
También puedes ofrecer ayuda con la transición, ya sea entrenando a tu reemplazo, documentando tus responsabilidades o proporcionando información relevante para que el proceso sea lo más transparente y fácil posible. Mantén una actitud proactiva para facilitar el proceso.
PLANEA TUS GASTOS E INGRESOS
Por último, asegúrate de entender cómo tu renuncia afectará a tu nueva etapa, si tendrás que ajustar tu presupuesto en caso de renunciar sin tener una oferta laboral porque tendrás un periodo sin ingresos fijos. Ten en cuenta que el periodo de conservación de derechos en el Seguro Social es de ocho semanas y si aún no eres dado de alta por otro empleador, el beneficio terminará.